Asesinato en el Camí de Relleu en 1678
La Costera de Relleu es un lugar que, como tantas veces se ha dicho y dirá, está lleno de historias y leyendas. Pues en nuestros registros parroquiales guardamos una de las menciones más antiguas, no solo del camino, sino de un asesinato.
Concretamente, hablo de una partida de defunción extendida un 27 de marzo de 1678 por Mosén Geroni Barrachina, Retor de Sella. Unos días antes “fon trobat mort de una escopeta Jaume Brotons de Relleu en este terme de Sella junt al cami de Relleu poch ans de aplegar al collado, o planter, damunt lo cami a la part solana”. Al igual que Pedro Menor, en 1844, que protagonizó el inminente final de la rebelión de Boné, o la infeliz Pepa Rosa en 1919, Jaume Brotons también vio el final de sus días en el camino Real que une Sella y Relleu.
En este caso, se detalla muy bien la zona en la que apareció su cadáver. Se nos presenta toponimia que hoy en día se conserva como el Camí de Relleu, derivado a Costera de Relleu o Camí de Sella (dependiendo del municipio en que te encuentres), y el propio collado, hoy en día llamado Collao de mossén Pere, también mencionado como “planter”. Incluso una tragedia como esta puede servirnos para contrastar topónimos tan presentes para nosotros.
El día 26 fue enterrado en la sepultura de Santa Ana de la iglesia de Sella, y como no tenía testamento, el Señor oficial de Valencia decidió que se cogerían veinte reales de entre todos sus bienes “per a be de la sua Anima”, y nombraron “malmesor”, o albacea, a su cuñado Andreu Llorens de Relleu.
Con los veinte reales pagaron los derechos de fábrica (1 libra) y de sepultura (2 libras), los derechos rectorales (5 libras y 11 sueldos) y los actos funerales “de la manera que a persones de semejants estats y asiendes, se acostumen fer”. Tuvieron que partirse los dos derechos fundamentales las dos parroquias, el de sepultura se lo quedó la de Sella, y el de fábrica, la de Relleu. Después, en nota posterior, Mosén Barrachina aclara que Relleu también tuvo que pagar el entierro “per ferseli mort intra leucam”, cuya cantidad fue de 3 libras y ocho sueldos.
Después de todo esto sobraban todavía 18 libras y 4 sueldos, y se destinaron a 54 misas rezadas. Además, con este remanente, el día 26 también se le dijeron letanías cantadas, una misa de Réquiem de cuerpo presente y otras dos misas cantadas “blanques”, una a “Nostra Señora del Roser” y la otra a la “Beneyta Santa Ana”.
Albert Rubio Rubio.
- Quinque Libri 1 (1623-1696). Obispado de Orihuela-Alicante.
- La expresión “intra leucam” se refiere a “sin exceder de una legua”, es decir, a una distancia media entre una población y otra (hoy en día nuestra frontera está pasando el Racó Ample). En el apartado sobre Sella del informe del Obispo Fabián y Fuero también se menciona la distancia en leguas que hay entre Sella y Relleu: “en el año mil quinientos setenta i quatro considerando el venerable Señor Don Juan de Rivera […] que Sella distava de Relleu más de una legua de camino ápero i peligroso […]”. Una legua, según la RAE, es una “medida itineraria […] definida por el camino que regularmente se anda en una hora, y que en el antiguo sistema español equivale a 5572,7 m”. Si recorréis el camino Real que va de Sella a Relleu, podréis comprobar que se tarda de una a dos horas en llegar, dependiendo de la marcha, es decir, equivalente a una legua más o menos desde cada población.